ISLAS VESTERÅLEN
El 9 de agosto abandonamos Finlandia con la intención de atravesar el norte de Suecia y llegar a Noruega para visitar las islas Lofoten, desde donde iniciaríamos el descenso hacia el sur. Partiendo desde Rovaniemi, nos dirigimos a Bjerkvik (8h) atravesando el norte de Suecia bajo una intensa lluvia y por una carretera en obras que fue un auténtico infierno. Hubo tramos que solo podíamos ir a 30km/h. Una vez en Bjerkvik, nos instalamos en una especie de área para furgos y autocas localizada al final de la playa, justo en frente del outlet. Sin más, paseito por el pueblo y a descansar.
A la mañana siguiente, nos dirigimos al archipiélago de Vesterålen, concretamente a la isla de Langøya para instalarnos en un camping (https://www.sortland-camping.no/) en el pueblo de Sortland (3h). El día básicamente lo invertimos en no hacer absolutamente nada, llegamos a mediodía, cervecita, comimos en el camping, descansamos y a media tarde (noche para ellos) nos acercamos a Sortland a dar un paseo. Sortland la verdad es que un poco sin más.

Ya cargadas las pilas, al día siguiente (11/08), con una climatología un poco regulera, nos desplazamos hasta Stø, localidad más al norte de la isla de Langøya y punto más septentrional que alcanzaríamos en el mapa en esta aventura. Partiendo del mismo pueblo de Stø realizamos una exigente pero espectacular ruta atravesando parte de la costa y varias montañas en las que encontramos unas vistas espectaculares (https://www.komoot.com/es-es/discover/Ubicaci%C3%B3n_seleccionada_en_el_mapa/@69.0171020,15.1393331/tours?sport=hike&map=true&focusedTour=1577063&pageNumber=1). Fueron unos 13km que completamos en unas 6h30. Larga pero merece muchísimo la pena. Después de la caminata, abandonamos Langøya para cruzar a la isla de Hadseløya e insatalarnos en el LoVe camping de Stokmarknes (https://www.lovecamping.no/), donde aprovechamos la tarde para lavar ropa.

ISLAS LOFOTEN

De Stokmarkens (12/08) nos desplazamos a Melbu, donde cogimos un ferry (16€) para cruzar a la isla de Austvågsøya ya en las Lofoten. Desde allí nos dirigimos a Svolvaer, capital del archipiélago de las Lofoten. Tras ubicar nuestra furgo en el área de autocas Svolvaer Bolipark, no fuimos a dar una vuelta por la ciudad. Svolvaer es una ciudad con ambientillo, recibe bastante turismo y hay pubs, restaurantes, centros comerciales, multitud de tiendas y oficinas para organizar excursiones… sobre todo en las cercanías de la plaza Torget. Allí, a pesar del desorbitado precio de la cerveza (alguna hay que tomar), encontramos el Pub Telegrafen de ambiente futbolero bastante animado (son muy hinchas de Bodø/Glimt).

Al día siguiente (13/08), partiendo de Svolvaer, hicimos la rutilla del monte Tjeldbergtinden de 5km que hicimos en unas 2h (https://www.komoot.com/es-es/discover/Lofoten/@68.3330560,14.6663890/tours?sport=hike&map=true&focusedTour=276989&max_distance=30000&pageNumber=1). Desde la cumbre encontramos unas vistas muy guapas. Estas islas son la ostia!! Aunque parezca mentira la foto de arriba y la de abajo están sacadas el mismo día y con la misma cámara. Ojo con el tiempo en Noruega que es muy cambiante.

Finalizada la excursión, visitamos el vecino pueblo de Kabelvåg y su acuarium (26€), lugar interesante para conocer de primera mano las especies marítimas de la zona. No es nada del otro mundo pero a mí me gusto. A continuación, nos dirigimos a visitar Henningsvær, un bonito pueblo ubicado en un conglomerado de islas. Posteriormente, nos trasladamos al camping Lofoten Bobilcamping (https://www.lofoten-bobilcamping.no/), ubicado en un paraje idílico. Es absolutamente espectacular despertar en estos lugares!

De Henningsvær, al día siguiente (14/08), partimos a la localidad de Borg (50min) para visitar el Lofotr Viking Museum (https://www.lofotr.no/). Un divertido e interesante museo donde nos adentraremos en el interior de una casa vikinga, visualizaremos como vivían, conoceremos aspectos sobre su historia, nos subiremos a uno de sus famosos drakkar e intentaremos practicar actividades vikingas como el tiro con arco. Muy chulo la verdad, encima está ubicado en sitio espectacular.

Tras la más que interesante visita al museo vikingo, fuimos a visitar una de las playas más bonitas que he visto nunca, la playa de Ramberg. Una verdadera joya situada en un paraje incomparable rodeado de montañas. Tuvimos la suerte de que el tiempo acompañó y que a pleno sol los intensos azules y verdes turquesa de sus aguas fueron un autentico regalo para nuestros ojos. Pena que la temperatura del agua hiciera casi imposible el poder bañarse en estas apetecibles aguas. Metí solo los pies y a poco más me los tienen que amputar.

Tras pasar toda la tarde en la playa, muy a nuestro pesar, ya que nos hubiéramos quedado allí toda la vida, nos trasladamos al camping Lofoten Beach Camp (https://www.lofotenbeachcamp.no/), donde nos encontramos con una agradable sorpresa, otra espectacular playa junto al camping en la que cervecita en mano disfrutamos de un atardecer espectacular y perpetuo que nunca llegó a culminar.

Culminando con nuestra ruta por las islas Lofoten (15/08), dejamos Ramberg atrás para dirigirnos al extremo más occidental de este archipiélago y de camino visitar las poblaciones de Nusford, Hamnøy y finalmente el famoso pueblo de Reine. Desde este último emplazamiento ascendimos la larga escalinata hasta llegar a Reinebringen (https://www.komoot.com/es-es/discover/Ubicaci%C3%B3n_seleccionada_en_el_mapa/@67.9244542,13.1198798/tours?sport=hike&map=true&focusedTour=1577629&pageNumber=1), donde nos encontramos probablemente con la vista más famosa de las islas Lofoten. Duro pero no te puedes ir de Reine sin subir. Apurando nuestros últimos momentos en las Lofoten fuimos a visitar el pueblo con el nombre más corto que jamás he visto, Å. Desde allí sin más dilación nos dirigimos a Moskenes desde donde cogeríamos el ferry (83€) para trasladarnos a Bodø, ya en el continente. Es conveniente ir con antelación para no quedarte fuera y tener que esperar al siguiente.
