LA HABANA

Nada más aterrizar en el aeropuerto José Martí de La Habana, se nos presentó el primer reto de este viaje, y no fue otro que intentar conseguir un precio digno por un taxi que nos trasladara a nuestro alojamiento en el Vedado. Nosotros pagamos 30 CuC, el cansancio del viaje hizo que tampoco nos esmeráramos mucho en conseguir un mejor precio. En la próxima no nos pillan.

Tras varias visitas a al capital cubana, esta sería la tercera, es una ciudad que no me termina de convencer, soy de la opinión de que si andas justo de tiempo hay otros lugares mucho mas interesantes en la isla en los que gastar tu tiempo. Como cada vez he venido con gente diferente siempre he estado obligado a visitar La Habana. Por ello creo que si estás en la misma situación que yo, ya se a por un vuelo o por que a tu acompañante le apetece visitarla, la mejor opción es hacer una visita rápida de 1 día.

 

Plaza de la revolución

 

Nuestra visita exprés a pie a La Habana comenzó en el Vedado y de allí nos dirigimos a la plaza de la revolución (35min) y al monumento a José Martí que está justo al lado. De allí tomando dirección hacia el Malecón fuimos a visitar el Callejón de Hamel, una calle pintoresca con obras de arte curiosas, galerías de arte y punto de referencia del arte callejero en la ciudad. Tras tomar un tentempié por la zona nos acercamos a visitar el malecón y posteriormente las peculiares, coloridas y coloniales edificaciones de la Habana Vieja, donde encontraremos la ultra conocida Bodeguita del Medio, que aunque andemos a toda prisa para ver lo máximo posible, para un mojito siempre hay tiempo. Después de callejear y callejear por La Habana Vieja, ya en el ocaso de la tarde nos dirigimos ver al capitolio y el colindante Gran Teatro de La habana. En la misma acera del capitolio, con un poco de paciencia, tendrás la opción de sacar una foto justo cuando pasa a algún coche de esos antiguos de colores con las típicas casas en tonos pastel de fondo ¡Quedan muy guapas!

 

La Habana Vieja

 

Ya cansados de tanta visita y de tanta foto nos fuimos a cenar al barrio chino de La Habana, donde encontramos múltiples restaurantes que combinan de una forma peculiar la gastronomía cubana con la oriental. Llenada la barriga, decidimos pillar unas cervezas y sentarnos en el malecón para simplemente ver la vida cubana pasar. En tema de bares, a parte de los que ya seguramente conozcas: La Bodeguita del Medio, Floridita etc. Si eres hincha del Athletic Club no puedes dejar de visitar el Sports Bar Bilbao Habana.

 

Callejón de Hamel

 

 

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